UN VIAJE AL PASADO

La evolución humana es algo que siemrpe nos ha interesado, algunas preguntas todavía siguen en el aire. Por suerte, nuestros antepasados dejaron constancia de su buena mano en diferentes artes como la pintura o la cerámica.
A una hora de la capital gallega conducimos hasta la provincia de Pontevedra, concretamente hacia  Praderrei donde se encuentra el Centro Arqueológico de Campo Lameiro. Este  centro es uno de los más emblemáticos de toda Galicia, pues en él se conservan petroglifos de hace más de 4000 años, además de exposiciones y una recreación de un pequeño poblado de la Edad de Bronce.

La visita consta de 3 partes: Por un lado, tenemos la zona de Interpretación y mediante unos paneles informativos nos explican brevemente los motivos que veremos en el recorrido del itinerario.
La siguiente zona a visitar es a través de un  trayecto de más de 3 km  por el Parque que se compone de 10 paradas en las que podemos encontrar diferentes motivos y grabados rupestres. Al comienzo de la ruta, encontramos a mano derecha, un laberinto de acero en el que podeís acceder sin ningún problema. Siguiendo las indicaciones del sendero, observamos que éstas fluyen de forma ascendente por lo que iremos viendo los diferentes restos arqueológicos como a Laxe da Forneiriña o la de los Caballos. Como la ruta es un poco pesada debido a que el camino tiene una pequeña subida, siempre podemos descansar o pararnos a tomar algo en uno de los cuatro merenderos que hay por todo el área. Nunca viene mal un poco de fruta para refrescar, especialmente, si váis un día un poco caluroso como nos paso a nosotros.

Como dato, curioso decir que éste Centro Arqueológico realiza visitas guiadas teatralizadas, cursos para niños como procesos de domesticicación de las plantas o cursos de cerámica entre otros.

Además, apuestan por la gastronomía local con la creación del programa``Noitepedras´´. Se trata de una experiencia nocturna en el que el cliente puede elegir entre tres opciones: ver los petroglifos únicamente, ver el castro o tener la oportunidad de disfrutar de una cena pagana con platos típicos tan apetitosos como pimientos de Padrón, churrasco y filloas con miel de postre.
Una experiencia única e inolvidable de pasar en compañía de amigos o familiares, saborear los manjares autóctonos y formar parte de la magia del universo bajo el cielo estrellado. Y  recordar a la vez, el legado heredado de nuestros antepasados: una cultura enterrada pero que perdura. Descubrámosla!


FUENTES: ÁREA ARQUEOLÓXICA DE ARTE RUPESTRE CAMPO LAMEIRO/